Taller de Artes Visuales: La unión de las experiencias compartidas.

Cada semana, la Organización de Estados Iberoamericanos, oficina Argentina (OEI), en cooperación con el Ministerio de Cultura de la Nación, ofreció una amplia oferta de talleres virtuales de lectura, arte y creatividad a pacientes afectados por el Covid-19 durante su período de internación en Tecnópolis –polo gestionado por el área de Cultura de la Provincia de Buenos Aires y temporalmente devenido en centro de aislamiento de pacientes leves–.

Mediante la iniciativa de Cultura e IBERLectura de la OEI, junto con el área de Contenido y Producción de Tecnópolis, y gracias a la valiosa colaboración de los operadores sociales Miguel, María José, Leo y Dolores, se propuso a los asistentes un espacio donde aliviar los momentos de aislamiento, tensión y ansiedad con recreación, arte, intercambio y construcción colectiva.

El domingo 29 de noviembre tuvo lugar el último taller de artes visuales, el cual coincidió con el cierre de la propuesta iniciada en agosto de 2020. Para celebrar esta ocasión, se abrió la convocatoria a los operadores sociales del predio sanitario.

En una primera instancia, se presentó al arte como un lenguaje que no debemos descuidar y, mediante la propuesta de “volver a dibujar como en la infancia”, los participantes realizaron garabatos, en los que después debían encontrar una imagen que pudieran representar y así, desarrollar su creatividad y capacidad expresiva. 

En un segundo momento, se expusieron una serie de obras de reconocidos artistas para, en palabras de la docente: “pensarnos como seres creativos y comprender que todo lo que expresamos se ve directamente influenciado por nuestro entorno y los momentos históricos que nos tocan vivir”. 

Luego, la tallerista propuso la intervención de tapabocas con la intención de resignificar un objeto de uso cotidiano en objeto artístico. Una de las operadoras al compartir su tapabocas expresó: “hice este dibujo porque yo acá vine a entregar mi corazón”.

Finalmente, a modo de cierre se relató brevemente la leyenda del hilo rojo, haciendo referencia a la unión que quedará en la memoria de cada uno de los asistentes del taller, como un trazo invisible que los enlazará a partir de la experiencia vivida en Tecnópolis. Así fue como los participantes unieron sus tapabocas con un hilo rojo a modo de representar esta unión.