La Tierra de la Esperanza
17367 familias colombianas aprendieron otra forma de trabajar sus tierras gracias al, Plan Integral de Sustitución de cultivos Ilícitos, PNIS y ejecutado por la Organización de Estados Iberoamericanos.
El proceso de reconciliación en Colombia se enmarca en diferentes iniciativas, encaminadas a recuperar el desarrollo económico del país a través de esfuerzos colectivos y acciones concretas que conlleven a una paz total. En este contexto se desarrollaron los acuerdos de Paz adelantados en la habana Cuba, y cuyo eje central del cuarto punto del acuerdo busca dar solución al problema de las Drogas Ilícitas.
El propósito primordial de este acuerdo fue generar desarrollo económico y social al interior de las familias, cuyo ingreso dependió por muchos años de los cultivos ilícitos, con los cuales cientos de familias se vieron inmersas en una economía ilegal ante la falta de oportunidades laborales, y económicas rentables.
Esta tarea ha atravesado diferentes circunstancias, que a la fecha según el informe del Centro de Estudios sobre Seguridad y Drogas (CESED) ha motivado la vinculación de 99.100 Hogares.
En este proceso la Dirección de Sustitución de Cultivos Ilícitos, ha desarrollado programas y proyectos cuya estructura esta orientada a la sustitución de cultivos de uso ilícito por proyectos económicamente rentables y con visión de futuro en el escenario ideal de un sector agropecuario participativo, aportante y transformador.
Para desarrollar estos propósitos y construir estrategias de cambio se hace necesario la vinculación de los diferentes actores públicos y privados que conforman estos territorios, siendo incluyente y primordial la participación de la cooperación internacional a través de recursos, técnicos económicos y humanos.
Es así como la Organización de Estados Iberoamericanos OEI se vinculó a este proceso a través del Plan Integral de Sustitución de Cultivos Ilícitos llegando a 9 departamentos y 16 municipios, con atención especializada en aspectos técnicos, comerciales y asociativos. Con la intervención 114 profesionales quienes apoyados 234 técnicos, hicieron parte de nuestro equipo de trabajo, desplazándose dentro de estos municipios, en muchas ocasiones enfrentando situaciones de alta complejidad por las mismas condiciones inhóspitas de los territorios, con la misión de impactar a 17.367 beneficiarios del programa, del aportando toda su capacidad humana y conocimiento para la transformación social y económica de las familias vinculadas.
Tuvo como estrategia la implementación de 2 componentes primordiales, el primero orientado a la prestación del servicio de asistencia técnica con un enfoque diferencial, el cual, a través de un proceso planificado, permitió realizar 78.239 visitas de asistencia técnica. Un segundo componente orientado al desarrollo económico de las unidades productivas, logrando la materialización de 15.822 entregas de bienes por valor de $67.453.431.222 representados en especies animales e insumos relacionados con el desarrollo de infraestructura para la consolidación de las unidades de producción.
Todos estos procesos contaron la participación activa de las comunidades en un intercambio de saberes y experiencias entre el equipo técnico OEI y los beneficiarios del programa.
Como resultado de esta participación de la OEI, en este proceso de transformación del sector rural y en especial de las comunidades, hoy contamos con historias de vida totalmente diferentes llenas de esperanza y ganas de continuar trabajando por la tierra que los vio nacer, aportando un sustento legal para sus familias.
Fernando Lopera, líder comunal de la vereda el pescado, ubicada en el municipio de Briceño del Departamento de Antioquía manifiesta su alegría y complacencia de ser uno de los beneficiarios del Programa, “a pesar de las dificultades por la ola invernal la OEI ha cumplido con el programa, en nuestra vereda fueron atendidas 53 familias que también están felices por lo que han recibido, acciones como esta nos permiten seguir soñando con un futuro sin miedo y con un desarrollo económico alejado de los cultivos ilícitos”. Sostuvo Lopera.