Estados Unidos y Europa tendrán vacuna contra la COVID-19 en enero de 2021, y Latinoamérica entre marzo y abril del mismo año
Lo ha asegurado el experto Hugo Sigman durante el encuentro virtual «Estado de la ciencia en Iberoamérica. El impacto del coronavirus: la vacuna como esperanza», evento organizado por la OEI.
Este miércoles se ha desarrollado el encuentro virtual Estado de la ciencia en Iberoamérica. El impacto del coronavirus: la vacuna como esperanza, impulsado por la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) y su Instituto Iberoamericano para la Educación y la Productividad. La cita ha contado con la participación del reconocido farmacéutico de origen argentino Hugo Sigman, fundador del Grupo Insud y especialista en los estudios vacunales que se están desarrollando a nivel global para combatir la pandemia de la COVID-19.
Durante la primera intervención, Mariano Jabonero, secretario general de la OEI, ha señalado que cada vez se pone más de manifiesto la relación entre ciencia y sociedad, y más aún, entre ciencia y políticas públicas, que hasta hace poco era irrelevante en la región. También ha expuesto que “la inversión en ciencia en la región iberoamericana creció entre 2009 y 2018 un 28% y, a pesar de ello, la economía de la región ha crecido en los últimos años mucho más que su inversión en I+D“.
Asimismo, Jabonero ha destacado el aporte que la OEI realiza a través de su Observatorio de Ciencia Tecnología y Sociedad y la Red de Indicadores de Ciencia y Tecnología, que ponen al servicio de la comunidad científica iberoamericana una batería de indicadores actualizados para el impulso de estas políticas públicas. “De los 574 proyectos que actualmente realiza la OEI en la región, ni uno solo lo hacemos solos”, ha manifestado para resaltar el valor del multilateralismo y la cooperación internacional para el fomento de la ciencia iberoamericana. Una afirmación a la que se han sumado Enrique Iglesias, ex presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y primer Secretario General Iberoamericano, y Enrique García, ex presidente del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), durante sus respectivas intervenciones en el webinario.
Por su parte, Mario Albornoz, director del Observatorio de Ciencia, Tecnología y Sociedad de la OEI, ha subrayado el trabajo realizado por la organización durante la pandemia: “analizamos diariamente la respuesta de la ciencia a través de dos ejes: por un lado, las publicaciones científicas y, por otro, los experimentos clínicos”. Este trabajo institucional ha llevado a determinar que, a 20 de octubre, en la región se han producido 6.178 publicaciones científicas sobre COVID-19, con España, Portugal y Brasil como líderes en la región.
En ese sentido, Rodolfo Barrere, coordinador de la Red de Indicadores de Ciencia y Tecnología, ha destacado el desarrollo de una herramienta interactiva, el Explorador de la investigación latinoamericana en COVID-19, que ha mostrado que, a día de hoy, hay más de trescientas instituciones iberoamericanas —universidades e instituciones clínicas, principalmente— con producción científica sobre la COVID-19.
Por su parte, Hugo Sigman, especialista farmacéutico invitado en el encuentro y fundador del Grupo Insud, se ha mostrado optimista de cara a 2021 en relación a la lucha contra la pandemia. Según Sigman, existen tres razones para ello:
- Se conocen algunas medidas epidemiológicas y sanitarias para prevenir la pandemia.
- Los tratamientos se han protocolizado.
- Se han producido importantes avances en las vacunas en el mundo.
En ese sentido, ha resaltado que, en este momento, hay 175 proyectos vacunales en todo el mundo contra el coronavirus y su metodología científica es revolucionaria a todos los efectos. “Nos introducen un virus benigno en nuestro organismo que no se replica para aprender a producir el antígeno en nuestro cuerpo, sino para generar la reacción inmunitaria”, ha explicado.
Durante su intervención, ha señalado que en Europa y EE.UU. contaremos con una vacuna para combatir la COVID-19 en enero de 2021. Esa fecha se retrasará ligeramente para Latinoamérica, donde seguramente llegará para marzo o abril del mismo año. Sigman ha afirmado también que se está trabajando con una efectividad de la vacuna del 70%. De acuerdo con el experto, en algunos países será una vacuna obligatoria, debido, en parte, a que algunos países ya cuentan con planes de compra de vacuna muy avanzados, incluso en Latinoamérica. Para conseguir la conocida como inmunidad de rebaño será preciso que el 70% de la población esté vacunada.
En cuanto a los posibles costes de esta vacuna, ha señalado que “mientras haya pandemia, la vacuna se va a vender sin beneficios para las farmacéuticas, que para el caso de la vacuna de Oxford AstraZeneca, se venderá en promedio entre 3 y 4 USD cada una”. En este sentido, ha declarado que la vacuna se venderá de manera uniforme en todos los países del mundo, debido en gran parte a la gran alianza público-privada que se ha generado a nivel mundial para combatir la pandemia.
Por último, Sigman ha expuesto que el promedio mundial de aceptación de la nueva vacuna es del 75%, con países como Polonia donde la aceptación es la más baja a nivel global y otros como China, donde el 90% de sus habitantes declararían ser favorables a vacunarse contra la COVID-19 o países como Rusia, donde el grado de aceptación es medio (52-53%). El experto ha concluido que los estudios de seguridad de la vacuna a corto plazo son buenos, pero que, evidentemente, no se disponen de ellos en el largo plazo.
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