Potenciar la digitalización, la economía creativa y el enfoque de género desde los gobiernos locales, una apuesta de la OEI

Hoy se ha desarrollado en la sede la OEI en Madrid un conversatorio para debatir sobre la cultura y el desarrollo desde el aporte de los gobiernos subnacionales. Superar las heridas de la pandemia, consolidar la propiedad intelectual y proteger a empleados y artistas son los retos que se vislumbran más urgentes.

La Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) ha realizado hoy el conversatorio «Cultura y desarrollo: aporte de los gobiernos subnacionales». La jornada ha tenido por objetivo abordar el papel que tienen los gobiernos de ciudades, provincias y regiones de Iberoamérica en el desarrollo económico de sus territorios a través de la cultura.

El evento ha contado con la participación de Sérgio Sá Leitão, secretario de Cultura del Estado de São Paulo (Brasil) y Juana Escudero, subdirectora de Educación y Cultura de la Federación Española de Municipios y Provincias. Ambos funcionarios estuvieron en diálogo con Mariano Jabonero, secretario general de la OEI, y Raphael Callou, director de la OEI en Brasil, bajo la moderación de Federico Buyolo, director de Innovación Cultural de la Fundación Ortega y Gasset-Gregorio Marañón.

Durante el coloquio, que puede verse en el canal de YouTube de la OEI, se ha puesto sobre la mesa el importante valor de las políticas culturales que ponen en marcha los gobiernos locales de Iberoamérica, así como el apoyo de la OEI en esta materia, teniendo en cuenta que este sector representa el 1.7 % de los empleos de la región, y constituye entre el 2 % y 4 % del PIB colectivo, según datos recogidos por la OEI y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en su informe La contribución de la cultura al desarrollo económico en Iberoamérica.

En su intervención, Mariano Jabonero ha asegurado que la cultura cada vez más “interesa” en las políticas públicas, ya que “nos une como iberoamericanos, nos da un carné en medio de la diversidad cultural de la región”, lo que también es “una oportunidad para el empleo”. Asimismo, ha afirmado que, si bien estamos en un mundo “más globalizado y fuertemente digitalizado, —lo que se ve en el actual protagonismo del sector audiovisual— también es un mundo que piensa más local”.

Para Jabonero, las políticas públicas culturales tanto a nivel local como nacional e internacional se enfrentan a tres retos: “Hay que superar las heridas de la pandemia. También es importante consolidar la jurisdicción de la cultura digital y la propiedad intelectual y, por último, proteger a los empleados, artistas y gestores culturales, los más afectados en los últimos dos años”.

Por su parte, Sérgio Sá Leitão ha destacado que, en el caso de São Paulo, que ha considerado ‘un estado nación’ en sí mismo, están intentando descentralizar los programas y acciones para que lleguen a más personas y más municipios. “Las políticas públicas de cultura llegaban a menos de 200 municipios. Hemos logrado llegar a 450 y la meta es, en 2024 llegar a más de 600”.

La iniciativa BibliON, por ejemplo, que se trata de una biblioteca digital gratuita compuesta de 15 mil títulos, “es una oportunidad para ampliar el acceso de contenidos a la población y que ya ha sido considerada «el Netflix de los libros»”, ha resaltado Sá Leitão.

Una política cultural más cercana

Juana Escudero ha defendido que “es en el territorio, en las ciudades y los pueblos donde se pone en práctica lo que dice la Carta Cultural Iberoamericana, y estos derechos culturales deben ser provistos por los gobiernos locales, más próximos a la ciudadanía”. “La descentralización aún está por hacer, falta que los gobiernos locales estén dotados de competencias concurrentes y recursos”, ha señalado.

Por su parte, Raphael Callou ha subrayado que desde la OEI en Brasil se desarrollan actividades en muchos estados y municipios relacionadas con la cultura y la economía creativa, iniciativas que han tenido un impacto en 382 mil personas en los últimos 4 años.

Entre estas iniciativas ha resatado la formación que se realizó en Brasilia a 4.000 mujeres durante la pandemia en el área de la gastronomía. “Este trabajo no lo hemos realizado solos, hemos trabajado en conjunto con otras instituciones generando un esfuerzo articulado de políticas públicas a nivel municipal, estatal y nacional”, ha subrayado.

El encuentro ha concluido con la reflexión alrededor del papel de la cultura en las agendas internacionales de desarrollo como la Agenda 2030, así como en el futuro de las políticas y derechos culturales recogidos por la Carta Cultural Iberoamericana en aspectos clave como el enfoque de género y la digitalización.