Las políticas estatales protegen a los países del avance del autoritarismo, según los ponentes del ‘States of the Future’ en Río
Funcionarios del gobierno brasileño y autoridades internacionales defendieron la presencia del Estado en las economías de los países en desarrollo como medio de proteger la democracia. El acceso a la financiación también se destacó como un reto.
La defensa de la presencia del Estado en la adopción de políticas económicas y sociales marcó la apertura de States of The Future, un evento paralelo al G20. La expresidenta de Chile y ex alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, destacó que la presencia del Estado es especialmente importante en un escenario en el que los gobiernos autoritarios están ganando fuerza.
Además, los ponentes subrayaron la importancia de que los países en desarrollo tengan acceso a la financiación para garantizar la reconfiguración industrial.
“La democracia no está dando el resultado esperado. Hay una pérdida de confianza en las instituciones democráticas. Cada vez más gente quiere un gobierno autoritario en lugar de uno democrático”, dijo Bachelet, añadiendo que era preocupante ver el crecimiento de la extrema derecha.
Entre las soluciones que sugiere está la creación de un sistema de financiación internacional. “Tenemos que trabajar en una arquitectura financiera mundial más eficaz que pueda responder a las necesidades”, afirmó.
En la misma línea, la expresidenta de Brasil y presidenta del Nuevo Banco de Desarrollo, Dilma Rousseff, argumentó que el reto de la financiación está en el centro para afrontar las crisis actuales, incluida la climática, y el desarrollo sostenible.
“Las condiciones globales de financiación, además de reducidas, son prohibitivas debido a los elevados tipos de interés y al riesgo cambiario practicado en las economías centrales”, afirmó Rousseff.
En su opinión, el peso de la deuda pública en los países en desarrollo es un obstáculo para el crecimiento. El pago de intereses en estos estados ha aumentado más rápido que el gasto público en sanidad, educación e inversión durante la última década.
El presidente del Nuevo Banco de Desarrollo es partidario de que todos los países tengan sus propios bancos de desarrollo, que deberían trabajar en asociación con los bancos de desarrollo nacionales y multilaterales.
En Brasil, el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) ha trabajado para reducir el coste de la deuda. Según el presidente del banco, Aloizio Mercadante, el Estado necesita definir políticas para hacer frente a la emergencia climática y reconstruir las economías. Para ello, aboga por reducir las disputas comerciales entre países.
“También necesitamos nuevos instrumentos. Tenemos el Fondo Amazonía, que es fundamental. Este año hemos batido nuestro récord de desembolsos. Hoy voy a firmar más alianzas para el Fondo Amazonia”, dijo el presidente del banco. “Tenemos que hacer más y hacerlo más rápido. Hay un déficit de recursos mundiales para hacer frente al desastre climático, que oscila entre 4 y 7 billones de dólares”, añadió.
Mercadante también afirmó que el 73% de las medidas de política industrial en este periodo de reconfiguración del comercio internacional han procedido de China, Estados Unidos y la Unión Europea, que representan dos tercios del sector en todo el mundo. “Las medidas son un creciente proteccionismo comercial, subvenciones, políticas de contratación pública y todo tipo de barreras”, dijo.
Política gubernamental
Para la ministra de Gestión e Innovación de los Servicios Públicos, Esther Dweck, “el Estado vuelve a estar de moda”. “Sabemos que en realidad nunca pasó de moda, sobre todo en los países que más favorecieron la agenda de debilitarlo externamente. El hecho es, sin embargo, que los parámetros del debate sobre su papel han cambiado desde finales del siglo pasado”, afirmó.
Al igual que Bachelet, Dweck cree que en algunos sectores sigue existiendo una retórica antiestatal, a menudo combinada con ataques a la democracia. La retracción de las políticas explica parte de las crisis actuales en los ámbitos económico, político, medioambiental, sanitario y geopolítico.
“Tenemos ante nosotros dos retos importantes. El primero es disputar la dirección de este debate, para que se traduzca en un refuerzo concreto de las capacidades del Estado, especialmente en los países en desarrollo, y para que se mantenga en el tiempo, trascendiendo las respuestas a la crisis del momento”, afirmó la ministra.
El segundo reto «es reimaginar el diseño de las capacidades estatales necesarias para hacer frente a los nuevos retos contemporáneos y emergentes», añadió.
Anielle Franco, ministra de Igualdad Racial, añadió que el Estado del futuro próximo debe ser, ante todo, inclusivo. «Ya nadie debe pasar hambre y la piel no debe ser el factor determinante para decidir si una persona va a vivir o no, si va a tener o no una vivienda digna, acceso a la educación, seguridad medioambiental y climática«, afirmó Franco.
States of the Future es promovido por los Ministerios de Gestión e Innovación de los Servicios Públicos (MGI), Asuntos Exteriores (MRE), Desarrollo, Industria, Comercio y Servicios (MDIC), el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Está organizado por Maranta y la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura de Brasil (OEI). El evento cuenta con el apoyo de Open Society Foundations y República.org.
