Proyecto de educación participativa desarrollado en Colombia será presentado en el 8º Foro Mundial del Agua
Durante el 8º Foro Mundial del Agua, que se realizará en Brasilia del 18 al 23 de marzo, habrá un espacio dedicado a cortometrajes producidos por comunidades de varias partes del mundo. Son documentales, ficciones y animaciones de hasta 4 minutos qu…
Durante el 8º Foro Mundial del Agua, que se realizará en Brasilia del 18 al 23 de marzo, habrá un espacio dedicado a cortometrajes producidos por comunidades de varias partes del mundo. Son documentales, ficciones y animaciones de hasta 4 minutos que muestran experiencias reales de cómo compartir el agua, buenas prácticas, nuevas ideas y soluciones encontradas para lidiar con el agua o con la falta de ella.
Entre los 110 vídeos de 26 países seleccionados para el festival La Voz de los Ciudadanos, hay un participante colombiano que cuenta la historia y los objetivos del proyecto «Educación participativa para la protección del agua en Colombia». La iniciativa, creada en 2016 por una organización sin ánimo de lucro con sede en Lausana (Suiza), SieNi, busca promover una cultura de gestión responsable del agua en la que niños y adolescentes jueguen un rol central en la conservación de las cuencas hidrográficas cercanas a sus escuelas y comunidades.
Como muestra el documental – concurrente a uno de los 10 premios que serán dados a los más votados por el público (votación hasta el 20 de marzo, aquí) –, los niños y niñas que integran los «equipos de agua» del proyecto son los protagonistas de esa historia. Orientados de cerca por profesores – y de manera virtual por científicos que viven en diferentes partes del mundo –, aprenden a investigar, hacer preguntas, apreciar y entender cómo cuidar el agua de sus comunidades.
«La idea es que los niños trabajen en los diagnósticos, en la formulación y ejecución de los proyectos de investigación-acción, en colaboración con profesores y científicos especialistas en agua», comenta la antropóloga Susana Borda Carulla, secretaria general de SieNi. «Queremos que los niños sean el alma de los observatorios de agua. Que ellos mismos se den cuenta, investigando, de la gravedad de la situación. Y que ayudemos a empoderarlos para empezar a enfrentar estos problemas”.
El contexto
Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), en 2010, Colombia estaba entre los nueve países que poseían el 60% de las reservas de agua dulce del planeta. Cinco años más tarde, en 2015, pasó al puesto 24. Si la situación continúa como está, en 2025, el 69% de los colombianos pueden quedarse sin agua en los períodos de sequía, de acuerdo con el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (Ideam).
Frente a este panorama, la Asociación Colombiana de Investigadores en Suiza (ACIS) realizó en 2015, en la Universidad de Ginebra, el simposio «¿Hasta cuándo tendremos agua en Colombia?». Con el apoyo de Colciencias (la entidad del gobierno colombiano encargada de la política de ciencia y tecnología), el encuentro reunió cerca de 80 investigadores colombianos y suizos, especialistas en agua. Decenas de ellos manifestaron interés en participar en un proyecto de cooperación que tuviera como objetivo educar a niños colombianos para la investigación y conservación del agua.
«Fue ahí donde nació este proyecto. Nació dentro de ACIS, pero creció tanto que ya no cabía en la asociación. Por eso, en 2016 creamos una organización específica para promoverlo e implementarlo «, cuenta Susana. Surgió entonces SieNi. El nombre es inspirado en la sabiduría de los pueblos indígenas colombianos: «Sie», diosa del agua, en la mitología muisca; «Ni», agua en kogui.
El piloto
«Educación participativa para la protección del agua en Colombia» sigue siendo un proyecto piloto. Iniciado en septiembre de 2017 en el Departamento de Antioquia, en Colombia, cuenta con 30 «equipos de agua» – así se llaman los grupos de investigación del proyecto. Cada uno de estos grupos es liderado por un profesor y cuenta con 15 a 20 niños y adolescentes. Los 30 profesores participan en talleres de formación para orientar a los estudiantes a hacer un diagnóstico del agua en la microcuenca más cercana a su escuela.
«En Antioquía, el problema del deterioro de la calidad del agua es especialmente fuerte. Allí los daños son rápidos porque la economía es próspera, hay muchas fuentes de contaminación. Y el problema se ha agravado particularmente en los últimos años», justifica Susana. «El proyecto piloto se da en Antioquía, pero tenemos la ambición de llegar a varios departamentos colombianos y otros países. A mediano plazo elegimos seis departamentos, en función del deterioro de la calidad del agua y también de las relaciones con los socios a nivel regional”.
En el caso del piloto, el socio regional es el Centro de Ciencia y Tecnología de Antioquia (CTA), con amplia experiencia en materia de investigación con niños, y profesores que desde hace muchos años trabajan en la región con el tema del agua, a través del programa Ondas de Colciencias.
Según la secretaria general de SieNi, el proyecto piloto tiene dos objetivos: evaluar la viabilidad y evaluar la estrategia. «Estamos desarrollando una serie de herramientas de seguimiento de los equipos de agua. Es decir, estamos probando el material pedagógico, la formación de los profesores. Hay cosas que funcionan bien, otras que hay que cambiar ante la realidad de campo», comenta. «Queremos que todo el material sea construido de abajo hacia arriba, que los profesores participen, que el lenguaje sea la de ellos, que ellos se vean reflejados allí”.
Las etapas
El proyecto piloto tendrá tres años de duración. En esta primera fase, los equipos de agua realizan el diagnóstico del estado del agua en sus microcuencas – o sea, toman conciencia de cuáles son los principales problemas en sus comunidades. En la fase 2, que comenzará en 2019, los equipos van a formular proyectos de investigación-acción basados en sus diagnósticos. «Estos proyectos van a estar reunidos en observatorios de agua. Serán acompañados y coordinados por universidades, tanto a nivel regional como a nivel nacional», explica Susana.
Una plataforma web, que ya existe y está instalada en la Universidad Nacional de Colombia, recibirá los datos que los equipos están recogiendo en campo. «Esta plataforma permite recoger datos georreferenciados de manera que todos los usuarios puedan acceder a ellos, tanto los equipos de agua como los investigadores y tomadores de decisiones. Comenzaremos a subir esos datos en la plataforma en 2019, y así tendremos un mapa de la situación local. La idea es que podamos apoyar este proceso para que las demandas de los equipos de agua sean escuchadas a todos los niveles, y que eso empodere a las poblaciones locales», comenta.
La tercera fase, prevista para 2020, tiene como objetivo apoyar la consolidación y la autonomía de los observatorios de agua. «Queremos que después del tercer año de intervención el observatorio pueda vivir de manera autónoma. Es decir, que se consoliden alianzas a nivel local, con empresas, con entidades locales interesadas en financiarlo», subraya. Actualmente, el proyecto cuenta con el apoyo financiero de la ONG Fondo Acción (administradora de la iniciativa en Colombia), del programa Ondas-Colciencias y de la Escuela Politécnica Federal de Lausana.
El Foro
El proyecto participa en el 8º Foro Mundial del Agua con el apoyo de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI). Realizado cada tres años, el Foro Mundial del Agua es organizado por el Consejo Mundial del Agua (WWC, por sus siglas en inglés) junto con el país sede y moviliza a varios sectores de la sociedad con el objetivo de fortalecer acciones y encontrar soluciones para la gestión de recursos hídricos en todo el mundo.
saber mas sobre o 8º Fórum Mundial del Água: http://www.worldwaterforum8.org/
Artìculo OEI Brasil.