La educación, la ciencia y la cultura: elementos clave de la transformación digital de Iberoamérica, apuntan autoridades en un foro en Nueva York

Esta tarde se ha realizado en la Gran Manzana el foro ‘Latinoamérica, Estados Unidos y España en la economía global’, convocado por el diario El País y la Cámara de Comercio España-EE. UU., con el apoyo de la OEI.

Con el objetivo de poner sobre la mesa la situación de la economía y geopolítica, así como los cambios sociales que atraviesan en la actualidad el triángulo conformado por España, América Latina y Estados Unidos, se ha llevado a cabo un foro organizado por el diario español El País y la Cámara de Comercio España-EE. UU., en el que, entre otras autoridades y expertos, ha participado Mariano Jabonero, secretario general de la OEI.

En la jornada, que se ha celebrado hoy martes, 24 de septiembre, en Nueva York y en paralelo a la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), han participado el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, entre un amplio panel de autoridades y empresarios.

En la mesa de debate titulada ‘Iberoamérica, EE. UU. y España: un espacio común para la transformación digital y la IA en educación, ciencia y cultura’, en la que también ha estado presente Carme Artigas, copresidenta del Órgano Asesor sobre IA de las Naciones Unidas, con la moderación de la periodista Inés Santaeulalia, Mariano Jabonero ha enfatizado en que la IA tiene el potencial de transformar el panorama educativo al mejorar la personalización, la eficiencia administrativa y la calidad de la enseñanza.

El secretario general de la OEI ha dado una visión amplia sobre los principales beneficios que las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial ya están suponiendo para los campos de la educación, la ciencia o la cultura, entre los que ha destacado la automatización de tareas administrativas, el análisis predictivo para la deserción o el bajo rendimiento académico y la mejora de la calidad educativa, así como también, la traducción de obras, la predicción de tendencias de consumo y la preservación, restauración y conservación del patrimonio cultural iberoamericano, entre muchos otros.

Asimismo, en lo que a ciencia respecta, Jabonero ha apuntado a las inmensas posibilidades que esta tecnología puede ofrecer en materia de descubrimiento de nuevos medicamentos, la medicina personalizada, la exploración aeroespacial o el desarrollo de plataformas para investigar colaborativamente.

Destacó durante que la regulación de esta tecnología debe también priorizar la protección de la propiedad intelectual. “Hemos creado una cátedra específica en el tema de la cultura digital porque si había un expolio fuerte en la región con patrimonio físico, que es histórico, además, ahora nos encontramos con un expolio del trabajo de creativos que viven de eso, que están desprotegidos por completo. Hay que presionar a los Gobiernos en esa dirección porque forma parte de la riqueza de la región”, ha advertido.

Por su parte, Artigas ha señalado que uno de los impactos más grandes en las industrias creativas será en temas de copyright y ha puesto el acento en la discusión sobre el valor humano en la creación artística. «La IA puede hacer una obra buena, variantes de Beethoven, por ejemplo, pero no va a generar al próximo Beethoven; es decir, le falta ese factor humano poco replicable y el valor de la nueva originalidad», ha apuntado.

Frente a un panorama en el que la investigación en materia de IA en Iberoamérica como herramienta para afrontar retos sociales desde una perspectiva regional parece estar rezagada en comparación con el resto del mundo, el secretario general de la OEI ha anunciado que la organización pondrá especial atención en los próximos meses al desarrollo de esta tecnología en tres proyectos concretos. En primer lugar, en el ámbito aeroespacial a partir de la Red Iberoamericana de Agencias Aeroespaciales que ha creado a solicitud de CELAC; también en la investigación relativa a los océanos y a la Antártica, protagonizada por el proyecto Cultura Oceánica y, en tercer lugar, en la transición energética (con el proyecto Energytran) y la ciberseguridad.

En ese sentido, durante su intervención, Jabonero ha apuntado también que el programa-presupuesto 2025-2026 que será presentado al Consejo Directivo de la OEI en las próximas semanas, la organización va a integrar de manera transversal la inteligencia artificial en sus acciones, garantizando que las nuevas tecnologías no aumenten las desigualdades y la brecha entre lenguas y poblaciones. Para ello, “se hace necesaria la cooperación entre lenguas, especialmente entre lenguas próximas como el español y el portugués”, ha acotado.