La OEI se suma a la conmemoración del Día de la Educación con un llamado a invertir más en la educación a lo largo de la vida
La OEI ha sido pionera en el desarrollo de programas sobre el aprendizaje de jóvenes y adultos en Iberoamérica desde hace más de 30 años, con la intención, reflejada después en la Agenda 2030, de no dejar a nadie atrás.
Este 24 de enero se celebra el Día Internacional de la Educación, que este año tiene por lema ‘Invertir en las personas, priorizar la educación’. En este sentido, la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) reafirma la importancia de invertir en este derecho fundamental a lo largo de toda la vida, promoviendo las alianzas público-privadas, la cooperación internacional y la implicación de la sociedad civil para lograr este objetivo.
En una región como Iberoamérica, que avanza hacia la alfabetización universal de la primera infancia y que supera ya los 30 millones de estudiantes universitarios, según cifras de la OEI, aún es necesario potenciar la educación y alfabetización de personas adultas en condiciones de vulnerabilidad tanto en zonas rurales como urbanas: una deuda aún pendiente con la región, sobre todo, después de la crisis del coronavirus que evidenció la brecha digital y educativa presente en todos los niveles.
En el caso de la población indígena adulta en América Latina, por ejemplo, pueden detectarse aún bajos logros educativos: casi el 70 % ha logrado culminar la primaria, mientras que apenas la mitad ha alcanzado los estudios de secundaria baja, pero poco más del 30 % ha llegado a completar el bachillerato, de acuerdo con el estudio La encrucijada de la educación en América Latina y el Caribe. Informe regional de monitoreo ODS4-Educación 2030 de la Unesco, una publicación alineada con el trabajo de consulta que hace el comité de seguimiento del ODS4 (Educación de calidad), del cual la OEI forma parte.
Naciones Unidas estima que 771 millones de adultos en el mundo son analfabetos. De estos, 27,5 millones están en América Latina y el Caribe, siendo 15,1 millones hombres y 12,4 millones mujeres.
“Desde la OEI hacemos un llamamiento para aunar esfuerzos regionales que conduzcan a la inversión de más recursos en programas y acciones educativas a lo largo de la vida”, ha señalado Mariano Jabonero, secretario general de la OEI. “Debemos entender la formación en todas las etapas de la vida como una oportunidad fundamental para reducir las desigualdades, promover la inclusión y apostar por el desarrollo humano pleno de las y los iberoamericanos«, ha remarcado.
30 años apostando por la educación a lo largo de la vida
La OEI, junto con el Gobierno de España, creó en 1992 los Programas de Alfabetización y Educación Básica de Jóvenes y Adultos en Latinoamérica (PAEBA), que evolucionaron en 2007 hacia el Plan Iberoamericano de Alfabetización (PIA), y que contó con la participación de 21 países de toda la región. Este plan, aprobado en la XVII Conferencia Iberoamericana de Ministras y Ministros de Educación, nació desde ese entonces con la vista puesta en “no dejar a nadie atrás”, como posteriormente recogió la Agenda 2030 y su Objetivo de Desarrollo Sostenible nº 4-Educación, en 2015.
Precisamente en ese año, y en consonancia con la nueva agenda de cooperación internacional, el plan se transformó en el Plan Iberoamericano de Alfabetización y Aprendizaje a lo Largo de la Vida (PIALV), hoy reconocido como uno de los programas de cooperación técnica más ambiciosos de la región iberoamericana, región que en los últimos 10 años ha logrado alfabetizar a 8,1 millones de personas.
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Recientemente, junto con la Organización Iberoamericana de la Seguridad Social (OISS), se han realizado iniciativas para fomentar el envejecimiento activo y saludable a través de la inclusión digital de las personas adultas mayores; y de la mano del Programa Iberoamericano sobre los Derechos de Personas con Discapacidad (PID), se han capacitado a docentes y mejorado las condiciones de acceso a plataformas digitales destinadas a personas adultas con discapacidad.
Asimismo, la OEI ha centrado sus esfuerzos en reafirmar la idea de la educación a lo largo de la vida en Iberoamérica, concepto que comienza a desarrollarse en las políticas públicas de la región, aún con importantes retos para su puesta en práctica. Para ello, la organización participa en foros internacionales de relevancia como la Conferencia Internacional de Educación de Adultos (CONFINTEA), en la que la OEI vela por la puesta en valor del aprendizaje a lo largo de la vida como motor de desarrollo y equidad en Iberoamérica.