Las acciones regulatorias son herramientas importantes para contener la inflación, dice panelista en ‘States of the Future’
Para la economista Isabella Weber, las reservas de reserva son parte de una 'caja de herramientas para prevenir desastres económicos'
La política de “reservas de reserva” podría ser un paso importante hacia el posneoliberalismo, especialmente en el contexto de crisis alimentaria e inflacionaria. Esta es la sugerencia de la profesora asociada de Economía de la Universidad de Massachusetts Amherst/EE.UU., Isabella Weber, quien cerró la segunda jornada de States of the Future.
La economía global se encuentra en un momento de grandes desafíos e incertidumbre. Vivimos en una era de emergencias superpuestas. El cambio climático, los conflictos geopolíticos y las interrupciones de las cadenas de suministro son algunas de las fuerzas que han generado importantes shocks económicos. «Estas crisis han afectado a sectores sistémicos y significativos, importantes para el sistema de producción, el sistema de distribución de la economía en su conjunto o para la vida humana, y el resultado son explosiones de precios y beneficios», afirma Weber.
El aumento de los precios en sectores esenciales como el de la alimentación estuvo acompañado de beneficios récord para empresas como ABCD (Archer Daniels Midland, Bunge, Cargill y Louis Dreyfus). En 2022, por ejemplo, Cargill informó un aumento del 23 % en sus ingresos, alcanzando los 165 mil millones de dólares. Este fenómeno, que ella llama «inflación del vendedor», ocurre cuando las empresas aprovechan los shocks de costos para aumentar los precios y proteger sus márgenes de ganancia. Otro ejemplo de esto es PepsiCo, que aumentó los precios incluso cuando los volúmenes de ventas cayeron, justificando estos aumentos basándose en la inflación.
La inflación generada por los aumentos de los precios de los alimentos afecta desproporcionadamente a los países de bajos ingresos y a las poblaciones más pobres, ya que una mayor proporción de los ingresos se gasta en alimentos, lo que exacerba aún más la desigualdad.
El papel de las reservas de estabilización
En opinión del profesor, “lo que necesitamos es un nuevo paradigma de estabilización posneoliberal, al que yo llamo una ‘caja de herramientas para prevenir desastres económicos’. Para que intervengamos antes y podamos liberar todos estos rígidos efectos económicos, sociales y políticos”.
Uno de estos instrumentos es el uso de reservas de reserva para estabilizar los precios de productos básicos como el arroz, el maíz, el trigo y la soja. La idea, que se remonta a la práctica de almacenar granos en tiempos de abundancia para venderlos en tiempos de escasez, podría aplicarse hoy para suavizar las fluctuaciones de precios. Al comprar cuando los precios son bajos y vender cuando son altos, el gobierno podría impedir la especulación privada y reducir la volatilidad de los precios.
Este sistema podría ser administrado por organizaciones de la ONU y financiado por los países compradores a través de transacciones especiales y otras fuentes. Además, el economista sugiere la implementación de leyes de control de precios e impuestos a las ganancias extraordinarias para contener la inflación generada por las grandes empresas.
“Las existencias de reserva también podrían proporcionar un mercado seguro y, posiblemente, precios seguros para el tipo de agricultura que es necesario desarrollar para mejorar la seguridad alimentaria y la resiliencia climática de los sistemas alimentarios”, comenta Weber.
Destaca, sin embargo, que esta política no es una solución completa, sino un paso vital para hacer frente a las emergencias económicas actuales. Combinada con otras medidas, como la transparencia en el control privado, la regulación de los mercados de productos básicos y el fortalecimiento de la soberanía alimentaria, esta política podría contribuir a promover una transición verde.
El Panel “Hacia un Paradigma de Estabilización Postneoliberal” contó con la participación de Nelson Barbosa, director de Planificación y Relaciones Institucionales del BNDES y fue mediado por Carlos Pinkusfeld, máster en Economía Industrial del Instituto de Economía de la UFRJ y director presidente del Celso Furtado.
States of the Future es promovido por los Ministerios de Gestión e Innovación de los Servicios Públicos (MGI), Asuntos Exteriores (MRE), Desarrollo, Industria, Comercio y Servicios (MDIC), el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Está organizado por Maranta y la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura de Brasil (OEI). El evento cuenta con el apoyo de Open Society Foundations y República.org.