Educación para la paz y los derechos humanos: clave para una Iberoamérica comprometida con la convivencia democrática y el desarrollo sostenible
En el Día Internacional de los Derechos Humanos, la OEI reivindica la necesidad de poner a las personas y las comunidades en el centro a través de una educación ética y en valores democráticos para asegurar una región respetuosa de los DD.HH., la paz y la sostenibilidad.
La Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) apuesta por dar prioridad a su trabajo en educación en derechos humanos, cultura de paz y desarrollo sostenible como uno de sus ejes estratégicos, con el fin de fomentar la convivencia democrática y a la cohesión social en Iberoamérica e impulsar así sociedades inclusivas, tolerantes, diversas, plurales e igualitarias en la región.
Este año 2024 se ha creado la Red Iberoamericana de Educación en Derechos Humanos y para la Ciudadanía Democrática, con el objetivo contribuir a la convivencia democrática en Iberoamérica fortaleciendo la ciudadanía global a través de la educación en derechos humanos, en cultura de paz y desarrollo sostenible a lo largo del ciclo de vida de las personas.
En el último encuentro virtual de la red “La educación para la paz y en derechos humanos en Iberoamérica ante los nuevos desafíos”, expertos del ámbito educativo, empresarial y social de la región reflexionaron sobre los desafíos y oportunidades actuales en la implementación de la educación en derechos humanos, paz y sostenibilidad en los países de Iberoamérica.
La discusión estuvo centrada en las dinámicas surgidas alrededor de la “Recomendación sobre la educación para la comprensión, la cooperación y la paz internacionales y la educación relativa a los derechos humanos y las libertades fundamentales” —conocida como la Recomendación 2023— de la Unesco, que proporciona una hoja de ruta para abordar como se construye ciudadanía democrática a partir de los cambios acecidos en el contexto mundial y de las exigencias de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
Junto a dicha recomendación, se pudo conocer el impacto de la directiva sobre diligencia debida de las empresas en materia de sostenibilidad (CSDDD) de la UE de 2024, cuyo propósito es garantizar que las empresas contribuyan al desarrollo sostenible y a la transición hacia la sostenibilidad de las economías y las sociedades, en su actividad o la de sus socios o filiales.
Bajo la moderación de Irune Aguirrezabal, directora del Programa Iberoamericano de Derechos Humanos, Democracia e Igualdad de la OEI, el encuentro contó con la participación de especialistas como Cecilia Barbieri, jefa de la Sección de Ciudadanía Mundial y Educación para la Paz de la Unesco, para quien la Recomendación 2023 “ofrece un marco transformador y práctico” en el que la educación se entiende “como un proceso continuo y a lo largo de la vida”, ya que “integra enfoques como desarrollo sostenible, ciudadanía global y derechos humanos”.
Por su parte, Ricardo Cuenca, profesor de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, del Perú, resaltó la importancia de revalorizar la educación para la ciudadanía democrática como “parte integral de la calidad educativa” e instó a modificar el imaginario social sobre la calidad educativa para que se vincule no solo al rendimiento académico, sino a valores como la democracia, la ciudadanía y el respeto por los derechos humanos.
Carlos Morales, experto en el área internacional de la empresa y colaborador del Instituto de Derechos Humanos Gregorio Peces-Barba de la UC3M de Madrid, destacó la importancia de la Directiva Europea de Diligencia Debida para vincular el sector privado con los problemas públicos, otorgándole un papel central a las empresas en temas de sostenibilidad y de derechos humanos .
Finalmente, Jackeline Guerra Batista, responsable de proyecto de Jóvenes Unidos por la Educación (Panamá), enfatizó en la relevancia de abrir espacios de participación para los jóvenes en la toma de decisiones, en procesos educativos y políticos.
Durante el encuentro, los participantes coincidieron en destacar la importancia de articular espacios de diálogo entre actores que trabajan estos temas e identificar y difundir buenas prácticas en materia de educación en DDHH, que permiten acompañar procesos de gran relevancia como la implementación de la citada Recomendación 2023 o la integración de la sostenibilidad y los derechos humanos en espacios tan diversos como en las organizaciones del sector empresarial. Esto es lo que hace la Red Iberoamericana de Educación en Derechos Humanos y para la Ciudadanía Democrática.
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