Se desarrolló el encuentro «Ciencia, Género y cambio climático: Experiencias y Aprendizajes», organizado por la OEI

La Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) organizó el evento "Ciencia, Género y cambio climático: experiencias y aprendizajes" en el Centro Cultural de España en Montevideo.
El encuentro formó parte de la agenda de trabajo de la OEI en Uruguay, que busca promover la participación de las mujeres en la investigación y la integración de la perspectiva de género en las políticas de ciencia, tecnología, innovación y cambio climático.
En la actividad se abordaron avances y desafíos en la región, y se compartieron proyectos que apuntan a fortalecer redes en torno a la igualdad de género en la ciencia y el cambio climático.
El evento contó con la participación de Macarena Llauradó, representante residente de la Organización de Estados Iberoamericanos-OEI en Uruguay; Gustavo Riestra, director de Cultura Científica de la Dirección de Educación del Ministerio de Educación y Cultura; Laura Osorio, gestora técnica del Observatorio de Ciencia, Tecnología y Sociedad de la OEI; Abril Tasende, responsable de proyectos de ciencia y género de la OEI en Uruguay, María Castelló y Anabel Fernández, del Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable (IIBCE-MEC) y Valentina Amaral, investigadora del Centro Universitario Regional Este (CURE-Udelar). Por su parte, desde España, Ana Capilla, directora de Educación Superior y Ciencia de la OEI.
Macarena Llauradó expresó su orgullo y satisfacción por la activa participación de las investigadoras y las instituciones presentes. Subrayó la importancia de la colaboración para asegurar que las trayectorias de las niñas y adolescentes sean completas y que puedan culminar sus estudios, destacando la necesidad de seguir promoviendo iniciativas en este campo.
Anabel Fernández del IIBCE, presentó datos sobre la participación de mujeres en la investigación en Uruguay. Señaló que, si bien el ingreso de hombres y mujeres en el personal de investigación es parejo, las cifras se van separando con el tiempo. Fernández mostró un gráfico con un efecto de «tijera» y explicó que la maternidad y las tareas de cuidado son factores que contribuyen a este cambio, afectando la trayectoria de las investigadoras. Concluyó que es un problema que está siendo visibilizado, pero que aún no se ha logrado revertir.
María Castelló presentó las características del XV Congreso Iberoamericano de Ciencia, Tecnología y Género que se desarrolla en Uruguay. La científica destacó la importancia que significa para Uruguay ser sede por primera vez de este congreso, que cuenta con más de 20 años analizando la ciencia y la tecnología desde una perspectiva feminista.
Laura Osorio, explicó que el Observatorio de la Ciencia, la Tecnología y la Sociedad se creó en 2008 para generar estudios estratégicos sobre estos temas en la región.
Osorio presentó datos sobre la participación de mujeres en actividades de I+D, revelando una gran disparidad en la región. Aunque en Uruguay la participación femenina en investigación es del 51%, en otros países no supera el 30%. También, destacó que la participación de mujeres en ingenierías y tecnología es “mínima” y no supera el 20% en algunos países.
Presentación del Proyecto «Más Mujer en Ciencia
El proyecto «Más Mujer en Ciencia» (MEC-ANEP-OEI) fue un eje central del evento. Esta iniciativa busca combatir la brecha de género, donde solo una de cada tres personas en la comunidad científica son mujeres.
Gustavo Riestra, destacó el aniversario número 40 del Programa Cultura Científica, que se cumple en este 2025. Riestra señaló que el porcentaje de mujeres en los Clubes de Ciencia ha crecido del 45% al 52%, superando a los hombres (48%) en los datos actuales.
El proyecto Más Mujer en Ciencia surgió en 2017, cuando una integrante de su equipo, Carla Pereira de la ciudad de Minas en el departamento de Lavalleja, propuso un proyecto para potenciar la participación femenina en la ciencia. Desde los inicios el departamento de Rocha a través de las gestoras territoriales del programa Cultura Científica también llevan adelante esta iniciativa.
Abril Tasende, detalló el rol de la OEI en el programa Más Mujer en Ciencia, al que se une en 2022, y subrayó el informe que vienen realizando respecto al impacto positivo de la iniciativa. La participación de niñas y adolescentes ha aumentado, siendo 112 las que participaron en el último año. Por otra parte, remarcó que «más de 50 investigadoras uruguayas han participado del programa Más Mujer en Ciencia».
El proyecto, que ha alcanzado un aproximado de 300 niñas y adolescentes, promueve las vocaciones en la ciencia y la investigación, además de visibilizar el trabajo de científicas uruguayas.
Valentina Amaral, una de las investigadoras participantes del proyecto Más Mujer en Ciencia, compartió su experiencia personal, transmitiendo la idea de que las científicas son personas «normales» con familias y pasatiempos, no el estereotipo de alguien encerrado en un laboratorio.
La científica también expuso su experiencia en la primera etapa de la Expedición Uruguay Sub200, la cual se destacó por la participación mayoritaria de mujeres investigadoras. Amaral enfatizó que este esfuerzo fue un proyecto colectivo y nacional.
Presentación de la “Noche Iberoamericana de l@s Investigador@s”.
Esta iniciativa reunió en 2024 a 34 instituciones en 60 actividades, con más de 3,000 personas involucradas. El objetivo es fomentar el vínculo entre la investigación y la sociedad, despertando vocaciones científicas y colaborando con la apropiación social del conocimiento científico.
Proyecto Energytran
Ana Capilla, presentó una actualización del proyecto Energytran, una iniciativa que busca contribuir a una transición energética justa y sostenible, como un reto común mediante el intercambio, la generación y transferencia de conocimiento entre América Latina y el Caribe y Europa. Las líneas estratégicas de este proyecto son la Tecnología, el Ambiente, el Impacto Social y las Políticas Públicas.
El proyecto cuenta con 300 participantes en las diferentes acciones llevadas a cabo hasta el momento y con la colaboración de cerca de 60 instituciones colaboradoras.
En este marco se presentaron las conclusiones del Primer Informe de Recomendaciones Políticas, que señala que las mujeres son más vulnerables al impacto del cambio climático y que continúan siendo las principales responsables de la producción de alimentos, la gestión del hogar y de los cuidados. También indica que, a pesar de los avances, las mujeres siguen enfrentando barreras significativas en el acceso energético debido al acceso limitado a recursos financieros y a la falta de representación en espacios de tom