Transición verde y justa, un reto para la cooperación entre la UE y América Latina
Según la Organización de Estados Iberoamericanos, la transición verde representa una oportunidad para que la región supere su baja productividad o su papel de proveedor de materias primas.
Bajo el título Transición verde: una oportunidad para la cooperación entre la UE y América Latina, la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) ha celebrado esta mañana un encuentro en la Casa de América de Madrid para poner el foco en este tema crucial para el desarrollo de los países iberoamericanos.
Mariano Jabonero, secretario general de la OEI, ha intervenido para destacar que “para América Latina la transición verde representa una oportunidad única para poder estar presente en toda la cadena de valor de tecnologías como el litio y el hidrógeno verde y no caer de nuevo en la trampa de ser meros proveedores de materias primas o la trampa de la falta de productividad. Por todo ello, esperamos que a partir de la Cumbre UE-CELAC se articulen más mecanismos de cooperación similares al Programa para el Fortalecimiento de los Sistemas de Ciencia y Tecnología (FORCYT), impulsado por la OEI y la UE”.
Enrique Ojeda Vila, director de Casa de América, ha ahondado en esa idea al destacar que esta transición verde y justa es especialmente relevante para América Latina, que concentra una gran biodiversidad y numerosos recursos naturales, al tiempo que es una de las regiones más afectadas por el cambio climático.
Durante la jornada, Ana Capilla Casco, directora general de Educación Superior y Ciencia de la OEI, ha presentado el informe El estado de la Ciencia 2022. Entre sus conclusiones, el estudio revela que la inversión de recursos en investigación y desarrollo en Iberoamérica solo representa el 0,8 % de su PIB regional. A diferencia de las demás regiones del mundo donde esta se vio incrementada, la inversión en ciencia y tecnología en 2020 disminuyó en Iberoamérica un 3 % como consecuencia de la pandemia, aunque ello no ha frenado el número de investigaciones ni su calidad. América Latina y el Caribe presenta un fenómeno de concentración de recursos: solo Brasil, México y Argentina abarcan el 84 % de la inversión total, según el informe. “Este mensaje es el que queremos que llegue a Bruselas para la próxima cumbre UE-CELAC: esa concentración de recursos, así como las capacidades existentes, representan una oportunidad para la región”, ha explicado Capilla.
Emilio Santiago Muiño, científico titular del Departamento de Antropología, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha expuesto que la transición energética dependerá de la triangulación de ecología, economía y políticas públicas y que solo grandes avances tecnológicos nos permitirán alcanzar el Acuerdo de París, la primera respuesta mundial vinculante frente al desafío del cambio climático.
El Estado de la Ciencia es una publicación anual de la Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT) —red coordinada por la OEI— y está editada su Observatorio Iberoamericano de la Ciencia, la Tecnología y la Sociedad, y por la Oficina Regional de Ciencias para América Latina y el Caribe de la UNESCO.
Una transición verde y justa
A continuación, Sebastián Nieto Parra, jefe de la Unidad de América Latina y El Caribe del Centro de Desarrollo de la OCDE, ha presentado el informe Perspectivas económicas de América Latina 2022. Hacia una transición verde y justa.
“En América Latina el 45% de los hogares están en la economía informal. Para que una transición verde sea justa se debe tener en el centro la creación de empleo formal. Sin las inversiones adecuadas, la transición verde provocará pérdidas de empleo, lo que ahondará en la desigualdad. No obstante, la inversión en sectores con potencial verde puede asegurar una creación positiva neta de empleo verde y formal”, ha manifestado el experto de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.
Por su parte, Rodolfo Lacy, director de Acción Climática y Medio Ambiente para América Latina y Enviado Especial para Asuntos Climáticos ante la ONU de la OCDE, ha presentado el Plan de Acción para la Neutralidad Climática y la Resiliencia en América Latina y el Caribe, con políticas transversales dentro de la economía circular o del paradigma cero de emisiones netas.
Posteriormente, han tomado la palabra Inmaculada Aguilar Nàcher, directora general de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), y Diego Rodríguez Rodríguez, catedrático de Economía Aplicada en la Universidad Complutense de Madrid, con la moderación de Emilio Santiago Muiño (CSIC). Durante el conversatorio se han puesto sobre la mesa cuestiones como la gran dependencia energética de los fósiles de Rusia, el alto consumo energético y la necesidad de ser transparentes y explicar bien a los ciudadanos los cambios en las políticas públicas de lucha contra el cambio climático para que estos puedan entenderlos.