Experiencia en la inversión, enseñanza por competencia o docentes generadores de experiencias memorables: recetas de la educación en tiempos de COVID-19

Expertos en educación de Iberoamérica han puesto sobre la mesa propuestas para conseguir que esta crisis no deje atrás, una vez más, a los más vulnerables.

Bajo el título Más allá de la Covid-19: Una nueva educación para un nuevo mundo, la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) y ProFuturo, el programa de educación digital de Fundación Telefónica y Fundación ¨la Caixa¨, han sido los organizadores y anfitriones este jueves de un webinar en el que reconocidos expertos en educación de la región han dado respuestas a interrogantes como cuáles son las claves de la innovación educativa en la era digital o las competencias necesarias para ser docente hoy.

En el encuentro han participado Magdalena Brier, directora general de la Fundación ProFuturo; Mariano Jabonero, secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI); Fernando M. Reimers, profesor de la Universidad de Harvard y director de la Iniciativa de Innovación Educativa Global; Fernando Trujillo, profesor de la Universidad de Granada y asesor científico-tecnológico en Conecta13; y Claudia Costin, fundadora y directora del Centro de Excelencia e Innovación en Políticas Educativas (CEIPE) de la Fundação Getulio Vargas. El webinar ha sido moderado por Juan José Leal, experto en Educación de la OEI.

La crisis sanitaria de la COVID-19 ha sido inevitablemente el hilo conductor de este webinar, como espejo que ha obligado a la escuela a mirarse de frente. En este sentido, la directora general de la Fundación ProFuturo ha afirmado que “nos toca seguir pensando en el modelo de educación que queremos y necesitamos para el mundo en el que nos va a tocar vivir. El siglo XXI necesita docentes digitales con competencias específicas para poner la tecnología al servicio del modelo pedagógico e introducirla en el aula con el fin de mejorar la calidad de la enseñanza”.

Una reflexión compartida por Mariano Jabonero, secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), quien ha asegurado que “ante la pandemia, hay dos reacciones posibles: una involutiva que supone volver al modelo educativo anterior, demostradamente insatisfactorio, con altas tasas de abandono escolar, bajo rendimiento o una inserción laboral escandalosamente baja en algunos países iberoamericanos; o apostar por la superación y el cambio, con un modelo educativo híbrido presencial-virtual, basado en competencias, adaptado al contexto de cada país, en el que se invierta más y mejor en educación y que recupere a aquellos alumnos que se han descolgado del sistema educativo porque son a quienes le hace más bien”.

El debate sobre la necesidad de una transformación y la innovación educativa no es nuevo, pero se ha intensificado con la pandemia. “Contábamos con desafíos preexistentes: el mundo ya vivía una crisis de pertinencia del aprendizaje antes de la COVID-19, así como cinco retos sociales de la educación: la inclusión, la competitividad, la gobernanza en sociedades democráticas altamente polarizadas con poca confianza en las instituciones, la violencia intrafamiliar y el desafío del cambio climático, que es la pandemia después de la pandemia. Y, sin embargo, me ha sorprendido la innovación educativa que se ha producido durante estos meses en Iberoamérica. La pandemia, por ejemplo, nos ha ayudado a poner en valor la importancia de potenciar los contenidos de ciencia y tecnología para los estudiantes”, ha expuesto durante su intervención Fernando M. Reimers, profesor de la Universidad de Harvard y director de la Iniciativa de Innovación Educativa Global.

Muchas de las organizaciones que trabajan en educación, como la OEI o ProFuturo, llevan mucho tiempo llamando la atención sobre la necesidad de que la escuela y la educación se adapten al siglo XXI y a la sociedad digital en la que vivimos, un proceso que se ha visto acelerado por la pandemia.

Por ello, Fernando Trujillo, profesor de la Universidad de Granada y asesor científico-tecnológico en Conecta13 ha expuesto cuál es la complejidad de aprender y educar en la era digital. Para ello, ha desglosado algunas premisas sobre la educación pos pandemia: “el aprendizaje hoy fusiona presencialidad con virtualidad; quien ha cambiado es el aprendiz, que aprende a lo largo de toda su vida y de forma transversal, además de en contacto con otros aprendices; y el gran descubrimiento del confinamiento fue saber que los docentes podíamos formarnos los unos a los otros a través de la conexión, la mentorización, el liderazgo (…). Los nuevos educadores de la era digital son aquellos que tienen la capacidad de generar experiencias memorables de aprendizaje”, ha explicado.

Por último, Claudia Costin, fundadora y directora del Centro de Excelencia e Innovación en Políticas Educativas (CEIPE) de la Fundação Getulio Vargas, ha expuesto su receta para el éxito de la educación en tiempos de pandemia: un aprendizaje basado en la resolución de problemas, colocando a la pandemia en el centro para que los estudiantes puedan elaborar lo que vivieron, aprender de ello a ser autónomos, aunque también capaces de colaborar con otros, y percibirse como ciudadanos globales.

“En tiempos de revolución 4.0 va a ser muy importante para los alumnos aprender a pensar de otra manera. No es posible enseñar a los niños empatía, adaptabilidad y capacidad de reinventarse si los maestros no tienen empatía, adaptabilidad y capacidad de reinvención”, ha asegurado la experta.